... Triathlon Half Vitoria 2016 ...
Se supone que el segundo objetivo del año, sobre todo por la distancia... Para mi una prueba más que no había preparado de forma específica, y que llegaba un poco tarde, tras un par de semanas de vacaciones y sin muchos entrenos. Pero he de decir que lo poco que hago me cunde bastante, desesperante para l@s que entrenan muchos más y son más metódicos y disciplinados...
Como en el triatlón también se corría la distancia Ironman, me sorprendió lo bien organizado que estaba y la logística necesaria para los participantes desde el día anterior.
Tengo que decir que soy una inconsciente y soy consciente de ello.
Me tomo este tipo de pruebas como una más, como si fuera una carrera de 12 km, mi único objetivo suele ser terminarla lo más dignamente posible. No suelo informarme de los recorridos (con seguir al de adelante me vale), ni las pendientes, ni las condiciones climatológicas, ni tan siquiera pienso que barritas, geles o isotónicos me vienen mejor, simplemente porque no los tomo en entrenamientos, ni entreno las transiciones, ni nada de nada... Digamos que voy a pelo, je,je!! Con los entrenos en los que la prioridad es disfrutar y quedar con los amigos o compañeros de trabajo, equipo, etc.. Porque si dependo de mí, he de confesaros que mi voluntad es muy quebradiza y cualquier excusa es buena para perdonarme el entreno.
El domingo corrí los 21km más largos de mi vida. Nade bien, lo esperado, tarde un siglo en quitarme el neopreno y guardarlo, lo normal en mí, cogí la bici y disfrute como nunca, me achicharre por las carretas alavesas pedaleando de forma constante y rápida para una torpe como yo. Nada más bajar de la bici vi a Alber y los niños, me sentía eufórica, no había petado en la bici, había comido y bebido lo suficiente para aguantar. otra transición infinitamente laaaarga, y salí a correr. Desde el minuto uno vi que pasaba algo, el reloj me confirmaba que mi sensación de ir muy lenta era real, y aunque quise convencerme que en dos o tres kilómetros cogería ritmo y hasta meta, no fue así. Costo llegar. Costo mucho. Las piernas no iban ¿Por que? No tengo ni idea. Pero no iban. calor, deshidratación, falta de combustible, cansancio, falta de entrenamiento,... Yo que se, que más da. Lo importante es que empecé a sufrir muy pronto y aún quedaban muchos kilómetros para la meta. me pare, anduve, corrí, bebí, tome geles...Pero aquello no iba a mejor.
La experiencia, cabezonería u orgullo me empujaron hasta el kilometro 19 donde ya empecé a visualizar el arco de meta. Y llegue en 5:48:55, por debajo de 6h...Increíble!!!!!!
Como en el triatlón también se corría la distancia Ironman, me sorprendió lo bien organizado que estaba y la logística necesaria para los participantes desde el día anterior.
Tengo que decir que soy una inconsciente y soy consciente de ello.
Me tomo este tipo de pruebas como una más, como si fuera una carrera de 12 km, mi único objetivo suele ser terminarla lo más dignamente posible. No suelo informarme de los recorridos (con seguir al de adelante me vale), ni las pendientes, ni las condiciones climatológicas, ni tan siquiera pienso que barritas, geles o isotónicos me vienen mejor, simplemente porque no los tomo en entrenamientos, ni entreno las transiciones, ni nada de nada... Digamos que voy a pelo, je,je!! Con los entrenos en los que la prioridad es disfrutar y quedar con los amigos o compañeros de trabajo, equipo, etc.. Porque si dependo de mí, he de confesaros que mi voluntad es muy quebradiza y cualquier excusa es buena para perdonarme el entreno.
El domingo corrí los 21km más largos de mi vida. Nade bien, lo esperado, tarde un siglo en quitarme el neopreno y guardarlo, lo normal en mí, cogí la bici y disfrute como nunca, me achicharre por las carretas alavesas pedaleando de forma constante y rápida para una torpe como yo. Nada más bajar de la bici vi a Alber y los niños, me sentía eufórica, no había petado en la bici, había comido y bebido lo suficiente para aguantar. otra transición infinitamente laaaarga, y salí a correr. Desde el minuto uno vi que pasaba algo, el reloj me confirmaba que mi sensación de ir muy lenta era real, y aunque quise convencerme que en dos o tres kilómetros cogería ritmo y hasta meta, no fue así. Costo llegar. Costo mucho. Las piernas no iban ¿Por que? No tengo ni idea. Pero no iban. calor, deshidratación, falta de combustible, cansancio, falta de entrenamiento,... Yo que se, que más da. Lo importante es que empecé a sufrir muy pronto y aún quedaban muchos kilómetros para la meta. me pare, anduve, corrí, bebí, tome geles...Pero aquello no iba a mejor.
La experiencia, cabezonería u orgullo me empujaron hasta el kilometro 19 donde ya empecé a visualizar el arco de meta. Y llegue en 5:48:55, por debajo de 6h...Increíble!!!!!!
UXIB:.) Creerme cuando os digo que gracias a vosotros llegue a meta. Os imaginaba en la plaza, subidos a las vallas, bajo un sol de justicia, mirando hacia el arco donde entraban los corredores para dar la vuelta y entrar en meta, esperando ansiosamente a ver una chica con buzo negro y gorra blanca... Y alguna lagrimilla se me escapó durante la carrera, viendo vuestra cara de decepción y desilusión si no hubiese entrado a esa plaza y por detrás os hubiese alertado de mi presencia para deciros "me he retirado, no quería sufrir más"... Así que gracias por estar ahí, esperándome y dándome fuerzas para saber llegar a meta con los brazos en alto, orgullosa de poder hacerlo.
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